EMAP presenta nuevo proyecto: Consejo de ancianos del siglo XXI
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A través de la Alianza Internacional RSE y el Desarrollo Sostenible para el fortalecimiento de la Paz (Arsepaz), la Embajada Mundial de Activistas por la paz (EMAP) presentó el proyecto “Consejo de Ancianos del Siglo XXI.
Este programa nace con el objetivo de contribuir con la transmisión de conocimientos, valores y principios de los adultos mayores por medio del diálogo y la comunicación, para formar personas competentes que practiquen los valores universales.
Durante una reunión realizada en el Parlamento Latinoamericano, la EMAP dio a conocer la importancia de la etapa de adultez porque es el momento donde la experiencia y el conocimiento del adulto mayor se pueden colocar al servicio de la comunidad, por medio de las virtudes adquiridas a través de los años.
Las personas mayores se pueden considerar como maestros de la vida, para orientar a las generaciones más jóvenes en diversas áreas.
Este proyecto tiene como propósito generar programas donde se desarrolle y se emule la capacidad de amar de los ancianos. Busca sensibilizar a la comunidad a apreciar y valorar al adulto mayor, rescatando la admiración, la dignidad y el respeto hacia ellos. Además, fomenta la creación de consejos de ancianos al interior de las empresas y en las comunidades.
Asimismo, lidera procesos apoyando a aquellos adultos mayores que sean inspiradores y promotores de cambio para la superación del ser humano y difundir las experiencias laborales y personales de los adultos mayores para que sean útiles en el desarrollo de las sociedades.
Arsepaz destaca la labor social y empresarial
Para esta ocasión Arsepaz reconoce al coordinador internacional de la EMAP, Miguel Bermúdez Marín como consejero de paz y promotor de felicidad por su labor empresarial y social, con una trayectoria de servicio al prójimo y de ejemplo para la sociedad.
Durante su participación Bermúdez indicó:
“Agradezco a Dios por esta oportunidad, y yo creo que una persona de mi edad tiene mucho que aportar a la humanidad en la búsqueda de la paz, la felicidad y la construcción de una sociedad más justa, próspera y equilibrada, a través de la transmisión de conocimientos y experiencias que nos ha dejado el transcurrir de los años”.
Agregó que las experiencias permiten al ser humano desarrollar virtudes como la templanza, la paciencia y el amor, que son necesarias para que la persona pueda vivir en paz consigo misma y con la sociedad.
Bermúdez resaltó la importancia de ser positivos en todo momento y aconsejó a los presentes estar siempre dispuestos a ayudar a otros, porque esa acción mantiene a la persona sana, feliz y les permite ser de beneficio a la familia humana.
“Yo espero que este programa que está iniciando hoy sea de gran beneficio y produzca un gran fruto para la juventud y para toda la humanidad”, concluyó.