Ciudades inteligentes: Análisis del consumo y producción responsable
Ver GaleríaCuarta mesa de trabajo de la Sesión RSE reúne a especialistas en desarrollo sostenible
Con el fin de concienciar al sector productivo en la implementación de la Responsabilidad Social Empresarial (RSE), basada en valores y principios, y a la ciudadanía, para abordar la problemática social y la sustentabilidad de la Madre Tierra, se desarrolló la temática Ciudades inteligentes: consumo y producción responsable, en la Sesión RSE para el Desarrollo Sostenible de la CUMIPAZ 2017.
El panel de expertos fue conformado por: Ash Pachauri, fundador y director del Centro para el Progreso Humano; Humberto Grimaldo, coordinador general del Observatorio Regional de Responsabilidad Social para América Latina y el Caribe (ORSALC); Jorge Reyes Iturbide, director del Centro de Inteligencia e Investigación en Responsabilidad Social Empresarial y Sustentabilidad - IDEARSE; y Javier Mestre, director de Corresponsables en México.
Los análisis se centraron en el impacto del consumo medioambiental y en el sistema de producción de las sociedades; a su vez, destacaron la importancia de que las ciudades sean capaces de responder adecuadamente a las necesidades de las instituciones, empresas y habitantes, de manera sostenible. El panel abordó dos de los Objetivos de Desarrollo Sostenible (11-12).
Los panelistas se dirigieron a un nutrido grupo de empresarios, académicos, ambientalistas y autoridades gubernamentales de diferentes países, reunidos en el Hemiciclo del Parlamento Latinoamericano, en Ciudad de Panamá.
Para introducir el tema, Javier Mestre (moderador), mencionó:
“Según las Naciones Unidas, en las ciudades vive el 54% de la población mundial, y se espera que en el año 2030 lo haga más del 60%; y mientras las ciudades ocupan solamente el 3% de las superficies del planeta, llegan a necesitar hasta el 80% del consumo de energía que consumimos en el planeta”.
Análisis y reflexión
Ash Pachauri, director del Centro para el Progreso Humano, indicó que una ciudad inteligente debe usar la tecnología para proveer soluciones e integrar a las comunidades urbanas para que puedan resolver sus problemas. Añadió que los valores humanos deben ser promovidos para afrontar los retos actuales de vivir en ciudades sostenibles.
Para el coordinador de la ORSALC, Humberto Grimaldo, las ciudades inteligentes son las que armonizan el entendimiento y la voluntad, y no como un impacto, sino como un efecto sistémico.
Indicó que de América Latina, Ciudad de México y Sao Paulo, se encuentran entre las ciudades más pobladas del mundo, y respecto a las otras, son las que mayor índice de inequidad manejan en toda la región y en el mundo.
Por su parte, Jorge Reyes, director de IDEARSE, opinó que es necesario poner a las personas en el centro de estas ciudades y ver de qué manera la tecnología se puede volver en ese elemento que permita desarrollar estos efectos sistémicos.
¿Cómo el sector productivo puede ayudar al desarrollo de ciudades inteligentes?
Pachauri aseguró que los negocios son cruciales para que financien la tecnología y contribuyan a la construcción de las ciudades inteligentes; agregando que los Gobiernos por sí solos no lo van hacer; no obstante, señaló que para lograr el desarrollo sostenible es fundamental la participación de las comunidades.
En este punto Grimaldo expuso: “Una ciudad inteligente real tiene que afincarse en el concepto, a mi modo de ver, de responsabilidad social territorial, y en el caso de las universidades, con sus proyectos de investigación tienen que transformar sus propios entornos, los entornos de sus propias ciudades”.
Reyes sostuvo que las empresas deben considerar la ética y la toma de decisiones como factores elementales para lograr el cambio; que consideren los riesgos, los impactos y la generación de valor.
A los consumidores y habitantes de las ciudades
En este aspecto, Ash Pachauri dijo:
“El crear ciudades inteligentes solo se puede lograr cuando la gente sea educada y tenga el conocimiento y puedan transmitir ese conocimiento a la acción, de otra manera muchas de las soluciones no se lograrán. Lo que realmente necesitamos es un sistema que funcione”.
Humberto Grimaldo hizo énfasis en la responsabilidad social territorial, señalando que la ciudad inteligente tiene que traer consigo un proyecto real de convivencia. “El territorio como espacio de aprendizaje, un aprendizaje reflexivo, un aprendizaje estratégico, y un aprendizaje práctico, y también el territorio y la ciudad inteligente como base física en sus dimensiones geográficas”.
Por su parte, Jorge Reyes habló sobre la importancia de ser un consumidor crítico e inteligente. “Que empecemos a ver este producto que estoy adquiriendo, qué hay detrás, cuáles son las prácticas en materia ambiental y social que tiene la empresa que me lo está poniendo en el anaquel”, señaló.