Enseñanza del Holocausto como paradigma del genocidio en la UNISIMÓNEmbajada Mundial de Activistas por la Paz

Enseñanza del Holocausto como paradigma del genocidio en la UNISIMÓN

Colombia

En las instalaciones de la Universidad Simón Bolívar de Barranquilla, la Embajada Mundial de Activistas por la Paz (EMAP) desarrolló el Foro Universitario “Educar para Recordar - El Holocausto, Paradigma del Genocidio”, el 4 de agosto de 2016.

La directiva internacional de la EMAP, Dr. William Soto Santiago como presidente ejecutivo, y la Lcda. Gabriela Lara, directora general, hicieron presencia en este evento al que también asistieron el señor gobernador del Atlántico, Eduardo Verano; José Consuegra, rector de la universidad anfitriona; miembros de la comunidad universitaria de la ciudad de Barranquilla; los sobrevivientes, señor Mario Lustgarten y la señora Miriam Oksemberg, sus familiares y miembros de la comunidad judía.

Promover, difundir y educar de manera efectiva a las actuales generaciones sobre la importancia de privilegiar los derechos y libertades fundamentales inherentes a todos los individuos, evita la reiteración de hechos como el Holocausto.

 

Universidad Simón Bolívar, espacio y territorio de paz, participante en la construcción de una sociedad más igualitaria

En su saludo de apertura, el rector de la universidad Simón Bolívar indicó que el 92% de los estudiantes dentro de la universidad, corresponden a estratos sociales nivel 1, 2 y 3; los cuales corresponden a su vez a los de menos oportunidades y posibilidades económicas.  Sin embargo, enfatizó que, a través de los jóvenes vinculados como estudiantes, se logra quebrar uno de los círculos viciosos que más impacta negativamente en la paz, y que son causales de producción de violencia al no tener la oportunidad de acceso a la Educación Superior.

 

«Esta universidad es un territorio de paz; como lo es toda institución de educación —muy particular, de Educación Superior—, donde hay la oportunidad de acceder a unos de los derechos más trascendentales que tiene el ser humano en la sociedad moderna, como es la educación. Derecho trascendental y primordial para poder constituir la identidad de la naturaleza humana», expresó el rector Consuegra.

Finalizó su intervención invitando a los estudiantes y profesores a que todos los días sean propositivos por la inclusión, por la justicia, por ser justos y por la construcción de democracia.

La enseñanza del Holocausto como paradigma del genocidio, ‘no debe ser dirigida exclusivamente a la razón, debe también apelar al corazón de cada persona’

«No debemos permitir que el Holocausto se convierta en una fecha o solamente en un acontecimiento histórico. La historia nos enseña datos y cifras, pero por sí sola no educa ni convoca a la reflexión o al cambio de mentalidades y de acciones».


William Soto Santiago
Embajador Mundial de la Embajada Mundial de Activistas por la Paz

Con esta reflexión, el presidente ejecutivo de la EMAP señaló las razones por las cuales es necesaria una educación integral, que reflexione sobre el alcance de las decisiones y acciones humanas, con el fin de prevenir futuros atentados contra la familia humana. En ese sentido, la participación estatal es trascendental.

 

«Para generar un entorno propicio en cada país (…) es necesario que cada Gobierno trabaje de manera integral, y que los legisladores revisen y actualicen la legislación nacional, y dicten las leyes antidiscriminación que sean necesarias», enfatizó William Soto.

 

En su intervención también describió el contenido del Programa Educativo que viene promoviendo en temas de prevención, promoción y protección de los derechos humanos, y la estrategia de integrarlo en las diferentes áreas del conocimiento.

En las reflexiones de este Foro participaron la licenciada Karen Revivo Cadosch, el rector de la Universidad CECAR de Sucre y el rabino Daniel Askenazi.

En su exposición sobre “Por qué enseñar sobre la Shoá hoy”, la Lcda. Revivo indicó a profundidad las características del Holocausto o Shoá como mancha de indignidad y oprobio en la hoja de vida de la raza humana, en el que no fueron culpables solamente aquellos que perpetraron los hechos, sino también quienes al guardar silencio se convirtieron en cómplices.

«Un estudio exhaustivo de la Shoá nos ayuda a pensar en el uso y abuso del poder, en los roles y responsabilidades de los individuos, de las organizaciones y de las naciones, cuando se enfrentan a violaciones de los derechos humanos.

 

También nos permite desarrollar una comprensión de las ramificaciones del prejuicio, del racismo, del antisemitismo y los estereotipos en cualquier sociedad; y nos muestra cómo hizo una nación moderna para utilizar su experiencia tecnológica e infraestructura burocrática para implementar políticas destructivas que iban desde la ingeniería social hasta el genocidio». —Lcda. Karen Revivo.

Para el Dr. Noel Morales, rector de la Universidad del CECAR, Sucre, es necesario buscar y encontrar dónde se perdieron los hilos del sentido de la vida pacífica, y comprender y aprender a vivir en comunidad, construyendo espacios de expresión, participación y comunicación. 

«Las nuevas generaciones, las que no habíamos nacido en la Segunda Guerra Mundial y conocimos solo a través de los libros y documentales su historia, se preguntan ¿qué relación existe entre el terrorismo y la educación, todo?

 

Reflexionaría y respondería yo: Educación y terrorismo no se la van, son fuerzas irreconciliables. La primera es la expresión esencial de la razón; y la segunda, de las oscuras fuerzas de la irracionalidad. Si la primera —es decir, la educación— alcanza su propósito, se evita el surgimiento de Leviatán, que es la segunda». —Dr. Noel Morales.

 

El rabino Daniel Askenazi, indicó que hoy día es necesario creer en el anhelo de vivir en paz y libres, para legar un mundo de buena voluntad y concordia:

«En memoria de los que ya no están aquí, y en honor de los que están; pero sobre todo, por nuestro deber con las generaciones que vendrán, proclamamos a una sola voz que debemos pugnar para que el hombre piense en paz, piense en la paz; pero no solamente impulsado por su instinto de conservación, sino fundamentalmente por el deber que tiene de superarse y de hacer del mundo una morada de paz y de tranquilidad, cada vez más digna de la especie humana y de sus altos destinos».

“Huellas para no olvidar”, un homenaje de exaltación a la vida de Mario Lustgarten y Miriam Oksemberg

 

Con el propósito de prohijar la verdad histórica en torno al Holocausto, y por ser este el acontecimiento histórico reconocido como paradigma de los genocidios, se develaron dos placas conmemorativas en honor a la vida de Mario Lustgarten y Miriam Oksemberg, sobrevivientes del Holocausto. La placa va acompañada de la lámina que contiene el texto, con una breve descripción de lo que sucedió en el Holocausto y de la historia del sobreviviente.

«Mi tío Mario Lustgarten, es sobreviviente de la Shoá, superviviente de ella; y gracias a su fortaleza espiritual, relator del horror que este genocidio significa en la historia de la humanidad» —Sra. Silvia Valle, sobrina de Mario Lustgarten.

«Mis padres se dedicaron a una sola cosa: A enseñarnos, a educarnos, a enseñarnos valores, a ser honestos; y a transmitir eso a mis hijos y a mis nietos. Eso es lo que nos queda de todo lo que ellos pasaron» —Sr. Abraham Oksemberg, hijo de Miriam Oksemberg.

La invitación es a generar conciencia sobre la importancia de la preservación de la vida y de los valores en la educación, para evitar que actos vergonzosos como el Holocausto de la Segunda Guerra Mundial se repitan