“Huellas para no olvidar”: Homenaje a los sobrevivientes de la Shoá y a la memoria de sus víctimasEmbajada Mundial de Activistas por la Paz

“Huellas para no olvidar”: Homenaje a los sobrevivientes de la Shoá y a la memoria de sus víctimas

México

Mediante la Resolución 60/7 la Organización de las Naciones Unidas (ONU) designó el 27 de enero de cada año como el Día Internacional de Conmemoración Anual en Memoria de las Víctimas del Holocausto.

Por tal motivo, la Embajada Mundial de Activistas por la Paz (EMAP) en México, organizó un homenaje a los sobrevivientes de la Shoá y a la memoria de todas aquellas personas que perdieron su vida durante la persecución nazi.

La ceremonia contó con la presencia de distinguidas personalidades del campo político y educativo; entre ellos, Alberto Aguirre, subsecretario de Gobierno, en representación del gobernador del Estado de Coahuila;  Rubén Moreira; por la Secretaría de la Juventud, Carlos García; y la directora del Museo del Palacio de Gobierno, Mina Garza



También asistió la invitada de honor Dolly Hirsch, sobreviviente del Holocausto, junto con su esposo Eduardo Bestandig; Patricia Domínguez, por la Comisión de Derechos  Humanos; por la comunidad Israelí de Monterrey, la maestra de Holocausto Mónica Szwarcer; el presidente de historiadores, Arturo Berrueto; y representantes de la EMAP.

Un minuto de silencio

Con un minuto de silencio comenzó el acto. Seguidamente, la directora del museo, Mirna Garza dio apertura al acto con palabras de bienvenida a todos los asistentes; durante su disertación citó una frase del presidente ejecutivo de la EMAP, William Soto Santiago:

«Un nuevo genocidio se puede evitar si concientizamos a la población mundial que no podemos ser indiferentes ni pasivos ante las circunstancias de intolerancia».

Por su parte, Francisco Guerra, coordinador nacional de la EMAP, presentó el proyecto “Huellas para no olvidar”, que tiene como propósito mantener vivo el testimonio de  los sobrevivientes  del  Holocausto  como una forma de prevenir la reiteración del capítulo más funesto de la historia humana.

Mantener vivo el testimonio

Dolly Hirsch, sobreviviente del Holocausto, dio a conocer al público presente parte de lo que vivió junto con su familia; expresó que su madre la dejaba cada mañana escondida en un bote de basura, y al llegar del campo de exterminio la sacaba; practicaba esta acción porque decidió que sobreviviera a los protocolos de la vida y la muerte.

«Yo creía que esa era la forma natural de vivir, no sabía que había otros niños. Quiero decirles que yo no soy un animalito, soy un ser humano con sentimientos, tenía la cabeza llena de piojos, padecí de tuberculosis, por lo que no pude  procrear hijos, pero adoptamos a Ari e Ileana», mencionó Hirsch.

Carlos García, representante de la Secretaría de la Juventud, en su discurso manifestó que las generaciones jóvenes están obligadas a conocer la historia y deben entender que hay mucho por hacer.

García agregó: «Favoreciendo la educación con principios, valores y luchando contra la discriminación de cualquier tipo, estos hechos no se volverán a repetir».

En honor a seis millones de judíos

Con la finalidad de recordar a los seis millones de judíos que fueron perseguidos y exterminados durante la Segunda Guerra Mundial, se efectuó el encendido de las velas; el acto estuvo a cargo de Mónica Szwarcer.

 

Al finalizar la ceremonia se procedió a la  firma del acta conmemorativa de la placa del proyecto “Huellas para no olvidar”. Luego se develó la placa de la sobreviviente Dolly Hirsch.

La placa en forma de Estrella de David contiene las huellas palmares de la sobreviviente y de su esposo Eduardo Bestandig, además va acompañada de una lámina que presenta un texto con una breve descripción de lo que sucedió en el Holocausto.



Para finalizar, Aguirre Villarreal, representante del gobernador de Coahuila, dijo:

«Gracias a todos los miembros de la EMAP, por traer a nuestro estado programas y proyectos que sin lugar a dudas ayudarán y formarán a todos los coahuilenses».

Los presentes participaron en el corte del listón, acción que indicó que quedaba inaugurada la  galería  del Holocausto,  donde  se  mostraron 20  cuadros que reflejaron una historia que todo ser humano debe recordar, enseñar y aprender de ella.