México impulsa el cambio para una mayor garantía de vida de sus ciudadanos

Mediante un Proyecto de Reforma a la Ley General de Salud y a la Ley General de Educación se busca establecer una cultura de donación voluntaria, altruista y habitual de sangre segura en México. La propuesta legislativa asegura que el logro de este objetivo se traduce en una mayor garantía del derecho a la vida y el derecho a la salud de todos los ciudadanos.

 

El proyecto ha sido introducido por el Grupo Parlamentario Nueva Alianza, encabezado por la diputada federal Karina Sánchez Ruiz, en la LXIII Legislatura de la Cámara de Diputados del Congreso de la Unión para aprobación definitiva. Esta iniciativa está siendo impulsada y promovida por la Embajada Mundial de Activistas por la Paz (EMAP), a través del Programa Integral de Donación de Sangre “En la Sangre está la Vida”.

 

Según el Centro Nacional de la Transfusión Sanguínea, en México se captan alrededor de dos millones de donantes, y de estos sólo un 3.8% de las donaciones de sangre se obtienen de manera altruista, una cifra mínima a lo establecido por la OMS y la OPS, organizaciones que estiman que al menos 2% de la población debería donar sangre de manera repetitiva para cubrir las necesidades de sangre de un país, además, que un suministro adecuado y fiable de sangre segura sólo puede asegurarse mediante donantes de sangre voluntarios regulares no remunerados.

 

Actualmente en Latinoamérica, solo Cuba y Nicaragua colectan el 100% de su sangre de donantes voluntarios, el resto sigue dependiendo de donaciones de familiares o allegados, y de donantes remunerados, grupo en el que se encuentra México. 

 

Organismos competentes han dado cuenta de que reformas anteriores a la Ley General de Salud, para impulsar la donación de sangre y sus componentes, han resultado insuficientes, porque a pesar de que la sociedad se ha vuelto más consciente de la importancia y necesidad de la donación de sangre altruista, en el Estado es una acción poco habitual. 

 

Con la presente enmienda de ley se plantea generar las condiciones que propicien el acceso continuo de sangre segura, entre estas, una labor de concientización que se realizará en las oficinas gubernamentales de los tres órdenes de Gobierno, en los espacios educativos, en las plantas productivas y en las organizaciones de la sociedad civil. De esta forma se estima aumentar el abastecimiento de sangre y garantizar un mayor estándar de seguridad en la obtención de plasma y sus derivados, lo que contribuiría a salvar más vidas y mejorar las condiciones de salud de todas las personas que necesiten una transfusión.

 

El llamado a apoyar la presente iniciativa de ley es hecho a toda entidad pública, privada y de la sociedad civil; el mensaje es dirigido a todos los mexicanos, haciéndoles partícipes de este proyecto para el beneficio de la nación.

 

 

La iniciativa considera que la donación de sangre requiere de una base legal que garantice la adecuación del procedimiento y la transparencia del sistema. El proyecto promueve ampliar las perspectivas que contribuyan a brindar una esperanza de vida a todas las personas que necesiten de este vital tejido líquido.

 

 

Bajo esta concepción, uno de los principales objetivos es que la sociedad comprenda que la sangre que se dona es para ella misma. Se promueve la donación de sangre como una actividad médica, ética y enmarcada en los principios de equidad, transparencia y justicia, con el fin de fomentar la acción altruista en la sociedad.

 

En este sentido, una de las estrategias consiste en establecer las condiciones que fomenten la cultura altruista y habitual de donación de sangre, al sensibilizar a la población de los beneficios que esta actividad representa. Incluir el compromiso social de las personas morales (oficiales, mercantiles, sociales) y que desde sus espacios promuevan la donación voluntaria de sangre para lograr un abastecimiento que dé cobertura plena a la demanda.

 

El proyecto considera necesaria la orientación sobre las necesidades sanguíneas del país, que los ciudadanos estén conscientes de que las transfusiones de sangre son imprescindibles para atender a la comunidad que padece problemas de salud, por ejemplo, a la población infantil con anemias graves, a las personas que sufren lesiones por accidentes o producto de actos delictivos, a pacientes con enfermedades crónicas, a personas intervenidas  quirúrgicamente y a las mujeres con complicaciones en el parto. 

 

La propuesta de ley hace énfasis en que el Estado tiene la obligación de garantizar el derecho a la vida y el derecho a la salud como derechos fundamentales de las personas en su territorio, y a su vez, destaca que el fomento de la donación altruista y habitual de sangre segura constituye un mecanismo garante del Estado mexicano para alcanzar dicha protección, en el caso de las personas que dependen de una o varias transfusiones de sangre para continuar viviendo.

 

Por esta razón, la propuesta incluye la organización periódica, en todas las instalaciones de las dependencias de Gobierno, de talleres, foros, exposiciones, ferias o conferencias sobre el tema de la donación de sangre, para generar conciencia y compromiso ante el acto voluntario. 

 

 

Para asegurar la autosuficiencia, la disponibilidad y seguridad de la sangre, y en la promoción de los modos de vida saludables, la propuesta legislativa plantea impulsar un sistema nacional para fomentar, promover y fortalecer, en los educandos de todos los niveles académicos, el deber cívico y solidario respecto a la importancia y trascendencia que tiene el acto altruista de la donación de sangre.

 

 

Como parte del Programa Integral “En la Sangre está la Vida”, la Embajada Mundial de Activistas por la Paz, reconoce la acción de los donantes de sangre voluntarios, altruistas y habituales, por lo que cada 14 junio, en celebración del Día Mundial del Donante de Sangre, en México y en demás países de América, la EMAP realiza una distinción a las personas que se han unido a esta iniciativa para salvar vidas humanas y mejorar la calidad de vida de millones de pacientes, de manera voluntaria y desinteresada, por lo que son reconocidos como héroes por la vida. 

 

A través de actos especiales, en unión a bancos de sangre y centros de salud, se celebra la voluntad, solidaridad y el amor de los donantes altruistas, a su vez, son organizadas actividades de sensibilización para impulsar esta acción en la sociedad.