Dr. William Soto | Recepción de la Placa Conmemorativa del Holocausto “Huellas para no olvidar”
Colegio Colombo Hebreo
Miércoles, 12 de agosto de 2012
Bogotá D.C., Colombia
Mis saludos al señor Jorge Alberto Mejías, rector del Colegio Colombo Hebreo, que hoy nos recibe en este recinto. A los sobrevivientes del Holocausto que se encuentran presentes, a todas las autoridades diplomáticas, religiosas, académicas, y a los jóvenes alumnos del colegio. Gracias por acompañarnos en este evento.
Holocausto. Episodio más doloroso en la historia de la humanidad. Hoy nos congregamos para recordar, para rememorar el episodio más lamentable de la familia humana: el negacionismo. Cada vez son más las personas que creen en los negacionistas, quienes pretenden convencer al mundo que la Shoá no existió. Y eso ofende no solo la memoria de las víctimas, incluso la vida de los sobrevivientes.
También con tristeza vemos que movimientos neonazis están teniendo respaldo político en algunos países de Europa y de América Latina, pero nosotros estamos trabajando para que esas cosas no sucedan. Queremos que nuestros países sean amigos del Estado de Israel y de su pueblo, porque amamos también a los países latinoamericanos y caribeños, y sabemos que los que bendicen a Israel serán benditos. Y es una bendición trabajar en pro de los derechos de Israel y ayudarlos para que nunca más se repita tan atroz genocidio como fue la Shoá.
Hay muchos libros de texto que omiten contar la historia del Holocausto. Nuestras voces quieren ayudar a propagarla para que no se repita el silencio que tuvieron las muchas personas y naciones durante la persecución de Hitler al pueblo judío.
La evidencia del Holocausto, el testimonio de los sobrevivientes... Está con nosotros el Sr. Sigmund Halstuch, sobreviviente del Holocausto. Su testimonio y el de otros inspiró la creación de este proyecto “Huellas para no olvidar”.
El testimonio de los sobrevivientes es un respaldo para la descendencia del pueblo de Israel, los cuales siempre han sido perseguidos, amenazados; y no podemos dar la espalda a esas amenazas. Tenemos que prevenir para que no ocurra una nueva persecución y surja otro genocidio, ya que también hemos escuchado en las noticias que hay naciones que quieren borrar del mapa a Israel. Esa amenaza está latente todo el tiempo.
Proyecto “Huellas para no olvidar”
Este proyecto busca transmitir la evidencia de la dureza y magnitud de lo que significó la Shoá para el pueblo de Israel. Pretende que el testimonio de los sobrevivientes, valientes, sea preservado y siga obrando cada día en distintos escenarios, embajadas, universidades, bibliotecas, colegios, gobiernos y sus parlamentos, y plazas públicas.
Hemos decidido no quedarnos lamentándonos por el avance de los extremistas e intolerantes, sino actuar, dar a conocer la verdad, y luchar para que sean la mutua comprensión y respeto los sentimientos que gobiernen los corazones de los hombres.
No podemos quedar callados, porque ese fue el problema grande en el Holocausto: el silencio de las personas y gobernantes de otras naciones, que aun sabiendo lo que pasaba no levantaron sus voces, se quedaron como observadores pasivos y se convirtieron en cómplices sin darse cuenta.
Nuestro mensaje para los jóvenes: La razón más importante para reunirnos hoy son ustedes, jóvenes del Colegio Colombo Hebreo, decirles que tienen en nosotros a sus amigos, los que pondremos junto a sus hombros los nuestros, para ayudarles a llevar la carga. Siéntanse orgullosos de su pasado, de su raza, de su historia, y luchen por hacer de su nación un pueblo más grande cada día.
La vida de los sobrevivientes y de la juventud judía representada en ustedes, merecen ser honradas. Estamos en un tiempo donde estamos viviendo, viendo cumplida la Escritura de Ezequiel, capítulo 37, versos 1 al 14: la visión de los huesos secos, que representa a Israel; y ya estamos viendo que los huesos secos se han juntado y se ha convertido ese campo de huesos secos en una nación libre y soberana; y el Espíritu de Dios regresará pronto a Israel. ¿Para qué?
Sigue hablando el profeta Ezequiel en ese mismo capítulo 37, versos 15 al 29. ¿Para qué? Para la restauración de Israel al Reino de David, y el Reino de David ser restaurado a Israel. Tan sencillo como eso es el resumen de esa profecía de Ezequiel, capítulo 37. Y estamos muy cerca de ver el cumplimiento de esa segunda parte de esa profecía. Ya la primera parte la estamos viendo: Los huesos secos ahora se han convertido en una nación libre y soberana y poderosa.
Ha sido ya trasladada la placa, como ustedes han visto, la cual es un testimonio en este colegio.
Que sea de mucha ayuda para ustedes, jóvenes de este colegio, recordando para no olvidar. Es como le dijo Dios a Moisés, y Moisés al pueblo hebreo: Que recordaran de dónde Dios los sacó, y los sufrimientos que tuvieron allá; y se lo recordaran, se lo contaran todos los días a sus hijos, a sus nietos y a sus bisnietos; así es también con la memoria de la Shoá: recordándola a los hijos, los nietos y los bisnietos. La historia acompaña al pueblo.
Algún día: Paz permanente para Israel. Hemos visto cómo será la paz permanente para Israel. Si se levanta algún Amán, recuerden: Hay que levantar la voz, no quedar silentes, para evitar que ocurra otro hecho tan triste para Israel.
Meditemos en estas cortas palabras y muchas gracias por vuestra amable atención.