Hoy el mundo conmemora el Día Internacional de los Derechos Humanos. Es un día para reflexionar si ha cesado la barbarie que vivió la humanidad durante la Segunda Guerra Mundial. Es un día para preguntarnos si el odio, la intolerancia y la discriminación contra nuestros semejantes por pensar o ser diferentes, ha cesado. Infortunadamente la respuesta es no.
"La educación debe trascender la mera transmisión de conocimientos para concientizar a las actuales y futuras generaciones en la importancia de respetar la dignidad humana, la identidad y la diferencia entre seres humanos que por ser distintos no dejan de ser nuestros "semejantes". Lo anterior, hace parte de las conclusiones del II Foro Judicial Internacional llevado a cabo en la Universidad de Buenos Aires, Argentina.
En coordinación con los directivos de la institución educativa, se dictaron conferencias y se proyectaron documentales sobre la historia del Holocausto, a más de 300 padres de familia que tuvieron un espacio para debatir y reflexionar sobre los factores que desencadenaron la barbarie nazi durante la Segunda Guerra Mundial; entre ellos, la intolerancia, la falta de respeto por la vida, la dignidad humana, la discriminación, y la falta de sensibilidad.
El Salón Verde del Palacio Legislativo de San Lázaro, sede oficial de la Cámara de Diputados de México, fue el escenario de la presentación del proyecto “Huellas para no olvidar” en este país.