Dr. William Soto | Presentación del Proyecto "Huellas para no olvidar" Capitolio de Austin, Texas
Honorable senador Eddie Lucio Jr.; respetado sobreviviente del Holocausto, señor Leon Horn; honorable representante Eddie Lucio III; subsecretario del estado de Texas, Coby Shorter; directora ejecutiva del Museo Histórico de Brownsville, Lcda. Maribel Guerrero.
Para la Embajada Mundial de Activistas por la Paz es muy significativo estar en este recinto de la democracia, recordando el septuagésimo aniversario de la liberación del campo de exterminio de Auschwitz, que se efectuó el 27 de enero de 1945; fecha escogida por las Naciones Unidas para conmemorar el Día Internacional en Memoria de las Víctimas del Holocausto, este año bajo el tema: “La libertad, la vida y el legado de los supervivientes del Holocausto”.
A través de la Resolución 60/7, la ONU “insta a los Estados Miembros a que elaboren programas educativos que inculquen a las generaciones futuras la enseñanza del Holocausto con el fin de ayudar a prevenir actos de genocidio en el futuro”. La Organización de las Naciones Unidas fundamentó esta declaración en la Convención para la Prevención y Sanción del Delito de Genocidio, que se aprobó para evitar que volvieran a repetirse genocidios como los cometidos por el régimen nazi.
De conformidad con los antecedentes históricos del Holocausto, este genocidio no tuvo como víctima a un solo pueblo. El Holocausto fue un atentado contra la humanidad, porque innumerables miembros de otras minorías murieron asesinados; por esa razón el Holocausto siempre será una señal de alerta y prevención para el mundo entero.
La Embajada Mundial de Activistas por la Paz lleva a cabo el proyecto “Huellas para no olvidar”, el cual fue creado con seis objetivos principales.
1.º Promover la defensa y educación en materia de Derechos Humanos. Si el Holocausto es una de las más graves violaciones a los Derechos Humanos, su enseñanza, además de educar, es instrumento para garantizar el reconocimiento y la protección de la dignidad del ser humano.
2.º Mantener vivo el testimonio de los sobrevivientes del Holocausto, como es el del señor Leon Horn, quien representa a todas las víctimas de los genocidios.
3.º Dar a conocer las lecciones universales que dejó esta etapa tan oscura que dividió la historia de la humanidad. Mostrarle al mundo hasta dónde puede llegar la intolerancia, la discriminación, la violencia y el control absoluto del poder por parte de un determinado grupo político que se abroga la facultad de decidir qué vidas se merecen ser vividas y quiénes deben ser exterminados.
4.º Identificar las causas y las circunstancias que propiciaron el Holocausto y otros genocidios, para, de esta forma, detectar las señales de alarma indicativas de la eventual comisión de un nuevo crimen internacional contra la familia humana.
5.º Educar para la Paz. La educación con valores y en derechos humanos es el principal instrumento para prevenir el genocidio, los crímenes de lesa humanidad, las masacres y, en general, los actos violentos. La educación es un poder, una herramienta para transformar mentalidades y, por ende, para cambiar al mundo; se educa para la paz o para la guerra; se enseña a amar o a odiar, a respetar o a discriminar.
6.º Finalmente, este proyecto busca promover acciones en diferentes estamentos: en el campo gubernamental, diplomático, político, académico y cultural, con el fin de que este crimen internacional no se relativice, no se minimice ni se olvide. Y así como debemos generar actividades educativas, vemos de suma importancia el trabajar en la expedición de leyes antidiscriminación y leyes que tipifiquen el delito del negacionismo de los diferentes genocidios ocurridos en el mundo.
El crecimiento alarmante del antisemitismo en todo el mundo y la persecución a los cristianos y otros grupos en diferentes países de Medio Oriente, son señales de alarma que nos convocan a la acción preventiva. La indiferencia del mundo incentiva la violencia contra los grupos minoritarios. Ante los niveles tan altos de irracionalidad, antisemitismo y violencia, son pocas las acciones que podamos emprender para promover el respeto por la vida, la igualdad, el respeto por el otro, el amor al prójimo y la tolerancia.
Exponer en el Capitolio del estado de Texas la Placa con las huellas del superviviente, señor Leon Horn, es muy representativo; porque con este acto y esta placa, y con nuestra presencia, honramos la valentía, la esperanza y la perseverancia como legados para la humanidad.
Muchas gracias