Jorge Jiménez | 3er Encuentro Internacional de los Hijos de la madre Tierra, Izalco El Salvador.

Canciller de El Salvador

Muy buenos días, en especial —en nombre del señor canciller de la República, el ingeniero Hugo Martínez— quiero darle la cordial bienvenida y saludo al doctor William Soto de la Embajada Mundial de Activistas por la Paz, y agradecerle por convocarnos - por convocarnos a este Tercer Encuentro Internacional de los Hijos de la Madre Tierra.

Además, queremos saludar con mucho respeto, al doctor César Salazar, presidente de la Corte Centroamericana de Justicia, también a la doctora Mirna Cunningham, representante especial del secretario general de Naciones Unidas para pueblos indígenas, al hermano Amadeo Martínez, consejero mayor del CICA, a la hermana Betty Pérez, que es coordinadora del Consejo Coordinador Nacional Indígena de El Salvador.

Quiero decirles que, como Gobierno también queremos saludar a nuestros colegas de la Secretaría de Cultura, de la Presidencia, del Instituto Salvadoreño de Transformación Agraria (ISTA), representante de la Procuraduría para la Defensa de los Derechos Humanos, que juntos trabajamos liderados por los pueblos indígenas (porque hay que decirlo de esta manera) en el Plan de Acción Nacional para pueblos indígenas.

Nuestro reconocimiento a los pueblos indígenas, particularmente al CCNIS, que ha tenido un liderazgo importante en la concreción de este Plan, que esperamos que a partir del otro año lo estamos monitoreando; un plan que contiene todas las aristas, todos los temas de los pueblos indígenas.

Porque desde el Gobierno del presidente Salvador Sánchez Cerén se ha planteado la necesidad de empoderar a todos los grupos poblacionales que históricamente han estado excluidos, nos referimos a las mujeres, a los niños, a las personas con discapacidad, a los adultos mayores, a la juventud y —particularmente— a los pueblos indígenas.

Entonces, el propósito ha sido de crear espacios de participación plena, donde —como decía la hermana Betty Pérez— ya no solo se proteste, sino que se participe en procesos de construcción propositiva, y donde se comprometa más al Gobierno (como debe ser), y por supuesto los pueblos indígenas se empoderen.

Por eso nos congraciamos con que se realicen actividades como estas, y en un esfuerzo en el cual no solo las instituciones de gobierno hemos estado participando, sino el Sistema de Naciones Unidas, donde hemos tenido un apoyo decidido también de FAO y de FIDA para concretar este Plan de Acción, que en los próximos días esperamos estarle presentando a la Nación.

Queremos decirles —como Gobierno también— que la Cancillería de la República hace honor a todos los compromisos internacionales que el Estado de El Salvador ha firmado, uno de ellos es la Declaración de Naciones Unidas sobre Pueblos Indígenas, que a través de la Conferencia Mundial de Pueblos Indígenas mandató hace dos años que se realizaran planes de acción en cada uno de los países.

De los seis países que se escogieron como proyectos pilotos: dos de Asia, dos de Europa y dos de América Latina (donde estamos junto a Paraguay), con todo beneplácito queremos decirles que, gracias al liderazgo de nuestros pueblos indígenas, el de El Salvador será el único plan que este año se concluirá y se podrá presentar, no solo a nuestro país, sino que al mundo como una experiencia exitosa de trabajo, liderada por los pueblos indígenas, y con el compromiso del Gobierno de la República.

Por lo tanto, para nosotros es importante esta actividad, y un gran aplauso a todo ese liderazgo de nuestros pueblos indígenas.

Pero además quiero comentarles - aprovechar que en estos momentos en Marrakech, en Marruecos, se ha iniciado la Conferencia de alto nivel sobre el Cambio Climático y el medio ambiente, mejor conocido como la COP22, donde se está discutiendo por los más de 197 países que conformamos las Naciones Unidas, toda esta situación del cambio climático, a la cual —como todos sabemos— el daño que le hemos hecho a nuestra Madre Tierra, no hubiera sido necesario si hubiéramos logrado - si hubiéramos escuchado a nuestros pueblos indígenas que siempre nos han dicho del respeto a la naturaleza, a la Madre Tierra, a la pachamama (como le llamamos). Y hoy —por cierto—, la invocación con la que iniciamos es de respeto a esos pueblos.

Vamos a participar como Estado de El Salvador a través de la Cancillería en todos estos espacios de discusión para luchar por los derechos de la Madre Tierra.

De hecho, en el Sistema Interamericano Centroamericano (Sistema de Integración —perdón— Centroamericano), uno de los ejes fundamentales es la gestión del riesgo y el medio ambiente, y entonces vamos a seguir participando de estos espacios, y por supuesto vamos a seguir trabajando junto a los pueblos indígenas, para que avancemos mucho más en el respeto a nuestra Madre Tierra, en su recuperación, pero también en la recuperación de los saberes y haceres ancestrales de nuestros pueblos indígenas y en sus derechos.

Quiero finalizar con una frase, con un pensamiento que se le adjudica a un indígena americano, y que si hubiéramos hecho caso hace muchos años de esto hoy no viviríamos esto, pero que nos debe llevar a reflexionar y a continuar trabajando, y dice así: “Cuando se seque el último río, se tale el último árbol y se muera el último pez, el hombre se dará cuenta entonces, que el dinero no se puede comer”. Trabajemos porque esto no siga sucediendo juntos: Gobierno y pueblos indígenas.

Muchas gracias y felicitaciones.