Historia del Holocausto cierra proyecto escolar
Las activistas por la paz de la ciudad de Olavarría, con el propósito de contribuir en el proceso de enseñanza y aprendizaje sobre los valores universales y el estudio de los derechos humanos participaron como invitadas especiales a la institución.
A través del programa Educar para Recordar que ejecuta la Embajada Mundial de Activistas por la Paz (EMAP), los estudiantes aprendieron del Holocausto, un hecho que debe ser transmitido a las presentes y futuras generaciones.
Educar para recordar
El proyecto de la EMAP tiene como objetivo fortalecer a través de una educación integral fundamentada en el aprendizaje de principios y valores éticos, morales y espirituales; tomando como base el estudio de la historia del Holocausto.
La docente María Estévez de Sousa y Gastón Bartol, director de la institución dieron paso a la EMAP para ser parte del cierre de las actividades que contó con la asistencia de siete docentes y 210 alumnos de 4º, 5º y 6º grado de ambos turnos (mañana y tarde).
Enseñanzas para la humanidad
En el salón de usos múltiples de la escuela se realizó la exposición de la estrella de la sobreviviente Liza Zajac de Novera, donde se narró su vida durante el Holocausto, asimismo se proyectó el video-documental “La corta vida de Ana Frank”.
Sousa, finalizó el acto con un estudio acerca de los inmigrantes, Bullying (hostigamiento escolar, matonaje escolar, matoneo escolar, maltrato escolar) y diversidad de culturas. También dio a conocer su experiencia durante la Guerra Civil de Angola.
En el proceso de descolonización y la Guerra Fría entre 1975 y 2002, surgió la Guerra Civil de Angola que constituyó uno de los conflictos más extensos de África, episodio del que Sousa y su familia lograron escapar y fueron refugiados en Sudáfrica.
Los asistentes en un libro de actas dejaron sus comentarios en relación al proyecto Educar para Recordar, entre ellos tenemos el de María Helena Esteves de Sousa, quien dejó plasmado lo siguiente:
“Simplemente agradecer…ante toda barbarie y tanta violencia, solo debemos desde nuestro humilde lugar, sembrar semillas de amor y esperanza. Vuestro trabajo es maravilloso y rescato todo ello. Aquí vale, verdaderamente el aporte de un granito de arena que se transformará en una montaña. Gracias.”
